89. ¡Oh, pueblo mío! No permitan que su discrepancia conmigo los conduzca a ser alcanzados por un castigo como les ocurrió a los pueblos de Noé, Hud y Sálih. Y recuerden que [el castigo] del pueblo de Lot no está lejos de ustedes.
91. Dijeron: “¡Oh, Jetró! No entendemos mucho de lo que estás diciendo, y te consideramos entre nosotros una persona débil. Si no fuera por el clan al que perteneces te lapidaríamos; tú no tienes poder contra nosotros”.
92. Dijo: “¡Oh, pueblo mío! ¿Acaso mi tribu es más importante para ustedes que Dios, a Quien han dado la espalda? Mi Señor abarca [con Su conocimiento] todo lo que hacen.
93. ¡Oh, pueblo mío! Obren acorde a sus principios, que yo obraré acorde a los míos. Ya sabrán en el futuro quién recibirá un castigo humillante y quién es el que miente. ¡Estén atentos, que yo también estaré atento junto a ustedes!”
94. Cuando llegó Mi designio salvé, por Mi misericordia, a Jetró y a quienes con él creían. Pero a los injustos les sorprendió el estrépito, y amanecieron en sus casas muertos,