[1] Este versículo indica que el ser humano cargará con el peso de los pecados que él mismo haya cometido y el pecado de quienes él haya desviado con sus acciones o sus palabras. De igual manera, los que enseñan la buena guía se beneficiarán de sus propias obras y obtendrán recompensa por todo aquel que haya seguido su ejemplo y enseñanza.