[1] El Profeta Salomón se distrajo viendo los caballos hasta que el tiempo de la oración de la tarde terminó con el ocaso, y por eso su lamento.
[1] Algunos exégetas interpretan que, debido a que lo hicieron olvidar la oración, el Profeta Salomón ordenó sacrificar a los caballos y que su carne fuera repartida entre los pobres.
[1] Ver Corán 21:83-84.